Tras un inicio optimista

Hola a todos!

Ya es hora de actualizar el blog y ponerlo al día con lo que ha ido aconteciendo hasta el momento en la apasionante tarea de luchar por un «hueco» en la línea de salida de Londres dentro de un par de meses.

A día de hoy, a falta de cuatro semanas para que la prueba de Madrid cierre el periodo de clasificación olímpica, ya se han disputado la mitad de las pruebas puntuables para nosotros este 2012(WC Mooloolaba, WCS Sydney y el Europeo en Eilat), y el balance que puedo extraer de ello es más que positivo.

La cuarta plaza que logré en la primera prueba del año, con el largo viaje a Australia que ello entrañó, y siendo competitivo hasta los últimos metros con triatletas de la talla de Brad Kahlefeldt, Laurent Vidal o David Hauss, fue una gran inyección de moral y un valioso primer reconocimiento al importante trabajo invernal acumulado los meses anteriores.

Después de este prometedor inicio, preferí regresar a casa (renunciando a competir en Sydney) para preparar el Europeo de la mejor manera posible, ya que este último era un evento de gran importancia en nuestros criterios a nivel nacional para lograr la segunda plaza para el equipo español olímpico (la primera está evidentemente ya en posesión de Javi) y la carrera se disputaba tan sólo una semana después de Sydney.

A modo de preparación y con el objetivo de realizar un buen entrenamiento a la vez de poder darle mi apoyo a Carol en su carrera, estuve en la Copa de Europa de Quarteira tan sólo una semana después de competir en Mooloolaba. Por cercanía, consideramos que competir en Portugal era una buena opción para buscar esa sensación agónica que en carrera logramos soportar durante los primeros kilómetros de bici al salir del agua. Probablemente acusé luego el cansancio del fin de semana anterior y con unas sensaciones no especialmente buenas opté por acabar la prueba guardando las fuerzas que pudieran quedar para la siguiente.

Y es que la próxima bien lo merecía, siendo probablemente el Campeonato de Europa más importante al que me había enfrentado y en el que varios países podían decidir o por lo menos encarrilar ya su equipo para Londres. La carrera no fue nada fácil, y es que tras una natación bastante justa no nos quedó otra alternativa que pelear cada pedalada en bici para contactar con el grupo de cabeza, allá por el kilómetro 35 y tan sólo a falta de 5 para empezar a córrer. Aun así, haberme alimentado e hidratado bien durante bici, me permitió poder correr en progresión hasta conseguir una sexta plaza que todavía no me asegura de forma matemática mi participación en los JJOO; pero que me deja en unas buenas condiciones para poder cerrarla en San Diego o Madrid, ambas pruebas a celebrar en el mes de mayo (12 y 27).

Hasta entonces aquí seguiremos haciendo lo que nos gusta, disfrutando de cada experiencia  y con la ilusión de aprender y mejorar cada día.

Gracias por vuestro apoyo y mensajes de ánimo, os deseo igualmente suerte y fuerza en todos vuestros proyectos y desempeños! Hasta pronto!